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Jesús explica: “a quién tomaré en el Rapto y a quién no”
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4 de marzo, 2016. Palabras de Jesús a la hermana Clare.

El Señor está con nosotros, Arraigados en el corazón. Y ha venido a aclarar la confusión sobré quién será tomado en el Rapto.

Como sabéis, he estado trabajando en el álbum y el pen drive durante días, por eso no he estado mucho aquí. Y he sentido punzadas de culpabilidad muchos días: “no estás rezando lo suficiente, eres como Marta, has perdido al Señor, Él está descontento contigo. Etc, etc”.

Así que dudé. Y cogí una carta Rhema que decía: “Estos pensamientos no son Míos, recházalos inmediatamente. Yo te animo y te doy Mi visto bueno”. Esto ayudó mucho, y además, Ezequiel discernió que yo estaba actuando según la perfecta voluntad de Dios.

Aun así, no había pasado el tiempo habitual de profunda oración con Él. Sentía mucha pérdida, Le echaba mucho de menos.

Ha sido una pelea, no sólo para mí sino también para Ezequiel y Carol. Ellos también han sido atacados con condenación, mentiras. Ya sabéis, un espíritu de mentira.

¿Sabéis quién nos mantiene tirando? Vosotros, que rezáis por nosotros. Vosotros sois quienes recibiréis parte de las recompensas de este ministerio. Vuestras oraciones están moviendo el Cielo y la Tierra para mantenernos en la batalla y en pie.
Esto me lo ha dicho el Señor. Chicos, todo lo que os puedo decir es gracias. No sé qué haríamos sin vosotros. Hemos sufrido MUCHOS ataques.

Jesús empezó a hablarme después de adorarle. Dijo:
“Ni se te ocurra pensar así. Como si fuera a dejarte sola, hundiéndote en la condenación después de todos los esfuerzos que has dedicado a Mí. Nada de eso. Yo estoy contigo, día tras día, hora tras hora. Sé que me echas de menos, Clare, y yo estoy cuidando tu corazón. Casi has llegado, Mi amor, casi has terminado. No te dejes acribillar por la condenación, y ahora ya sabes que no viene de mí en absoluto.

Los demonios están muy enfadados contigo porque sigues, no paras, y ellos te odian por ello. Tienes una cadena de oración bastante grande que te apoya, a muchos de quienes ni siquiera conoces. Sin embargo, ellos rezan por ti día y noche y esas oraciones contribuyen a la victoria. Así que no te preocupes con los reproches del enemigo”.

Estas fueron palabras interesantes del Señor, porque hablé luego con Carol y ella me confirmó que el Señor le había dicho que los demonios estaban muy enfadados, porque no tirábamos la toalla, hicieran lo que hicieran. Fue una buena confirmación.

El Señor continuó entonces:
“Hablemos de las características de los que serán salvos, aunque así como por fuego”.

¡Gracias, Señor! Tantos me preguntan sobre sus familiares no salvos, a partir del sueño que diste a Pam sobre el tsunami en el norte de California, cuando Tú estabas de pie en la playa y le pedías que corriera a decir a todos que el Rapto está a punto de suceder. Reza la oración del pecador con todo el mundo.

Por cierto, en la próxima frase se refiere a algo que había dicho a Carol: que cada uno tiene diferente capacidad y diferente deseo de Jesús.

Esto es lo que dijo:
“Es muy cierto que tazas de té, dedales y barriles serán tomados. Yo miro el corazón y cada uno tiene diferente capacidad, cada uno se ha formado diferente, cada uno tiene un don diferente. Por eso habrá personas tan variadas en el Rapto.
Novias, las hay con diferente nivel de compromiso, diferente nivel de humildad y entrega, deseo y correspondencia a Mi Gracia. Pero lo misterioso de esto es que yo las quiero a todas, por igual, totalmente. Aunque en el dedal no cabe lo que cabe en barril, está lleno de Mi amor. En esto no hay sitio para discriminación o juicio. ¿Y si te dijera que un dedal contiene más que un barril?”.

Señor, si Tú me dijeras eso, me sorprendería, pero creo que el dedal es bonito. Sólo me sabe mal que sea tan pequeño.

“¿Crees que el dedal Me tiene en menos o Me quiere menos?”.

“No lo sé. Supongo que como tiene menos capacidad, es menos”.

“Piensa en la ofrenda de la viuda”.

“Dio todo lo que tenía”.

“Exacto. Los hay que tienen poco y lo han dado todo. Los hay que tienen mucho y lo han racionado, guardando algo para ellos”.

Pensé en mí un momento, y dije: “Odio decir esto, pero creo que estoy dentro de esa categoría, porque hay cosas que no he dado”.

Respondió diciendo:
“Yo juzgaré eso. De hecho, Yo seré el juez de todos. Aun así, la viuda que dio la pequeña ofrenda es mucho más rica que la viuda que era rica y dio sólo una parte. Es un misterio, pero entiende: Yo no miro el tamaño de la vasija, sino el abandono completo con el que la vasija da. En cierta manera, los que poseen muchas gracias y aun así no se entregan a Mí, son muy pobres en el Cielo, porque no entregaron algo. Pero como el niño que Me dio su muleta como regalo de Navidad: eso era todo lo que tenía”.

Chicos, aquí el Señor se está refiriendo a una historia: Amahl y los visitantes nocturnos. Es una de mis historias preferidas. Los tres Reyes pararon en su casa de camino a ver al niño Jesús. Y Amahl, a quien le faltaba una pierna, quería dar algo de valor, también. Todo lo que tenía era una muleta que le ayudaba a andar. Y aunque los tres Reyes tenían regalos magníficos para dar, Amahl escogió dar lo más valioso que tenía… y se curó.

El Señor sigue:
“Èl era el más rico de todos. Cómo me gusta que los desfavorecidos se queden prendados de mí y entonces darles TODO lo que siempre han querido o soñado. Estas cosas me hacen muy feliz. Lo que quiero dejar claro es que no es el tamaño de la vasija lo que importa, sino lo llena que Me la dan. Si me dan todo lo suyo, yo les doy todo lo Mío. Y si pueden contener todo lo Mío o no, no importa. Lo que importa es que son completamente Míos. ¿No es maravilloso?”

“¡Sí lo es, Señor! Es sublime. Como dijo Madre Teresa: a Dios le gusta más lo pequeño”.

Siguió:
“Eso está garantizado. Y Dios mira la pequeñez del corazón, no la pequeñez del ministerio. Cuando eres responsable de alimentar a tanta gente, te tengo que dar más y más y más para abastecer la demanda. Pero eso no significa que tú te hayas hecho grande. Más bien significa que yo me he hecho grande a través de ti. Y cuanto más pequeña la vasija, más se me valora. Así debería ser”.

“Señor, mi corazón se alegra con esto. Cómo me desagrada esa grandeza”.

Respondió:
“Sí, desde luego, mejor si no estuviera. Pero los que tienen un corazón pequeño y son muy pequeños se alegran con eso, porque otros pueden ver lo que he hecho con un pequeño nadie y tener esperanza de que también a ellos los utilice”.

“Señor, ¿qué pasa con los que son salvos en el último minuto? Muchas personas me han preguntado esto”.

“¿No dije que ellos recibirían la misma recompensa que los contratados al principio de la jornada?”

“Pero pensaba que eso aplicaba a los que habían trabajado para Ti, que estaban esperando preparados para servir, como nosotros”.

“Clare, en Mi gracia insondable, no puedo negar a la conversión sincera más reciente el regalo de ser sacado de este planeta. Si se han dado enteramente a Mí con arrepentimiento absoluto, también ellos serán tomados. Pero tiene que ser sincero y total. A los que todavía me quieran sin comprometerse, no los tomaré.

Te diré quién debería estar preocupado: quienes Me conocieron, supieron lo que les pedí hacer, y aún así, siguieron a su propia carne y propia voluntad. Los que no tuvieron tiempo ni dinero para los pobres, y se guardaron el dinero para gastarlo en sus comodidades y caprichos. Cuando os lo advertí hace siete años, lo decía muy en serio. Tú estabas en el borde y yo necesitaba que te entregaras a Mi voluntad absoluta. Cuando te diste cuenta de la gravedad de tu estado, te arrepentiste y Me pediste que te ayudara a dejar esas tonterías.

Pero algunos hijos Míos han sido cristianos durante años y todavía andan tonteando. Intuyen que están en el borde, pero creen que Mi misericordia cubrirá su negligencia. No, hijos Míos. Mi misericordia no es para los que se han soltado de Mi mano. Es par los perdidos que nunca Me han conocido y para los débiles que tropiezan cada dos pasos.

Las ovejas que son grandes y fuertes pero aun así no tienen tiempo para Mí, se quedarán atrás hasta que sean perfeccionadas con caridad, honestidad y devoción por Mí. Ellos tienen que escoger.

Muchos de ellos han recibido grandes gracias pero las han utilizado egoístamente, incluso dentro de la fe, para acumular riqueza, popularidad e influencia. O en cambio, han utilizado la gracia para el mundo, para vivir como reyes.”

“¿Qué pasará con los maestros ricos de verdad?”

“Los que han puesto su corazón en Mis manos y han hecho todo lo posible para obedecerme, serán tomados. Repito que no es la riqueza ni el poder lo que descalifica, sino el corazón tibio. El corazón que no ha tenido en cuenta lo que sufrí por ellos y cómo los he llamado a sacrificarse por Mí. Estos son los que fueron como el joven y rico gobernante, que dijo que tenía muchas posesiones, y yo les digo que son pobres, porque no Me tienen a Mí.

Estos son por quienes deberíais preocuparos todos. Los he llamado muchas veces. Han tenido muchas oportunidades para negarse a sí mismos, coger sus muletas y seguirme. Pero estaban cegados por la popularidad entre los hombres. Y por eso serán dejados.

Los que se han salvado en el último momento, si caen rotos por su obstinada negación y por ir retrasándome a Mí y a Mi reino… si están profundamente arrepentidos, hasta el fondo, los tomaré. Uno de vuestros hijos puede estar en ese grupo, ya os lo he dicho anteriormente”.

En este punto empecé a tener dudas: “¿Era Jesús? ¿O estaba oyendo un espíritu de mentira?”

El Señor respondió:
“Clare, no te estoy engañando. Sé que la última semana más o menos has estado preocupada, pero confía en Mí. Estoy hablando contigo, Mi amor. Lo digo con todo Mi corazón. Tengo intención de derramar el aceite en esta hija cuando sea el momento, porque ella ha sido fundamental en alejar a otros de Mí y de ti”.

“Señor, hazlo por favor. Por favor, Señor. Ella es un alma bella. Rezo porque ella consiga ser tomada en el Rapto”.

Continuó:
“Es la primera vez que te he visto invertir tu fe en ella. Sigue pidiéndome. Quédate junto a Mí, Clara, no te apartes. Recuerda que soy misericordioso. A veces nuestros hijos cometen errores tontos, porque son niños y no piensan o ven como los adultos. Ellos ven el mundo como un tarro lleno de caramelos, todos diferentes y atractivos. No ven los puntos muertos y sin duda el enemigo los mantiene ciegos a la verdad. Ha habido momentos de verdad en su vida en los que ella tuvo en cuenta estas cosas. Tiene posibilidades, sigue rezando.

Pero al resto de Mis cristianos maduros, os digo que observéis vuestro camino. ¿Habéis vivido de verdad para Mí y habéis respondido a Mi llamada, o habéis preferido vuestras comodidades? ¿Me valoráis lo suficiente como para morir por Mí, o seguiréis protegiéndolas? Para vosotros, llegará un día en que os veréis forzados a saltar del borde. Sabed que este momento está a la puerta y vuestra eternidad está en juego.

¿Creéis que ser cristiano por nombre os salvará del infierno? Por favor, pensadlo bien. Nadie puede reírse de Dios. Nadie puede tomarlo a broma. O eres frío o caliente. Los tibios serán probados por el fuego y se salvarán sólo si se aferran a Mí por encima de sus hijos, familias, trabajos, e incluso su vida.

Aquellos por quienes Mis novias han estado rezando… se les dará la oportunidad de recibir un golpe profundo y arrepentirse con todo su corazón, y los tomaré en el Rapto. Ay de los que desperdicien esta gracia: seréis dejados y tendréis que enfrentaros al fuego.

No todos recibirán las mismas recompensas en el Cielo, no todos descansarán en mansiones. Algunos tendréis la suerte de tener una choza en las afueras. Aun así, seréis felices, porque entenderéis justicia y aceptaréis vuestra parte con gran gratitud.

Así que, espero que esto te haya aclarado mucho a ti y a Mis queridos. No quiero que nadie se quede atrás y sufra la Tribulación. Pero para los que no se arrepientan en ese momento, los visitaré con gracia. Experimentar la Tribulación y quizás el martirio será vuestra única opción para bendición eterna en el Cielo conmigo.

Pero a vosotros también os digo: nunca dudéis de Mi presencia y Mis ganas de perdonaros. Siempre estoy con vosotros, esperando el momento en el que veáis la gravedad de vuestro estado y volváis a Mí con todo vuestro corazón”.